Ir al contenido principal

Etiquetar el amor - Esther Cerón


Me sigue impactando que hayamos sido capaces de ir poniendo etiquetas a diestro y siniestro a todo lo que percibimos, pero si en algún sitio me rechinan del todo es en el amor. ¿Quiénes somos para juzgar, opinar o censurar la manera de amar de otros?

El amor no debería ser juzgado, no debería tener que explicarse. Tengo amigos gays y amigas lesbianas, excelentes almas que han pasado un calvario por sentir diferente. Los han tachados de enfermos, de viciosos y de mil cosas más. Nos rebelamos contra lo que no entendemos o no compartimos.

Trabajo con terapia regresiva, y me doy cuenta que arrastramos muchas de las improntas de otras vidas y si el tema simplemente es que te has dejado por hacer algo cuando fuiste hombre o mujer en la anterior o en trescientas vidas antes.

¡Nos falta tanta empatía con los demás! Te quiero hacer una reflexión porque bajo mi experiencia, vivirás lo que no entiendas antes o después. La tierra es una universidad, vienes a aprender. Cada uno está en su proceso, que es el que ha venido a trabajar voluntariamente. Es un proceso divino y el alma sabe cada movimiento perfecto para evolucionar.

Dedícate a trabajar para llegar a tu mejor versión, a eso vienes. No opines sobre cosas y situaciones que no conoces, porque tal vez en la próxima vida tu alma te ponga a experimentar aquello que criticaste y entonces pasarás por cada fase y cada dolor que no supiste mirar desde el amor.

El amor, la medicina que cura todas las cosas. Tómate dos cucharadas de él cada día al levantarte, para que cuando estés tentado de juzgar lo que no entiendas, te impidan caer en la tentación de pensar que tú estás por encima del bien y del mal.

Si todos venimos del mismo polvo de estrellas, y entiende que es polvo estelar, que te veo venir, lo que le hagas a uno de nosotros te lo estás haciendo a ti mismo. El Universo es circular, todo vuelve…

Allí dónde estés, seas quién seas, te deseo Amor.

Feliz Vida

Esther Cerón

Comentarios

Estas son las entradas que más os gustaron

Abrazos - Marta P. Mahaux

  “Un día alguien te va a abrazar tan fuerte, que todas tus partes rotas se juntarán de nuevo” Alejandro Jodorowsky Nos conocimos hace muchos años, quizá unos 12. Al principio congeniamos poco, pero en seguida me cautivó. Nos hicimos inseparables. Hablábamos de todo, era mi confidente y mi paño de lágrimas, la persona que mejor me conocía, quien sabía absolutamente todos mis secretos. Recuerdo que buscábamos cualquier momento para poder estar juntos, aunque solo fuesen unos minutos. Como estaba mucho más ocupado que yo, siempre era él quien proponía hora y día. Me di cuenta de que solía ser siempre algún momento en que ya no tuviese más obligaciones, o que las que tuviese, fuesen a ser después de pasadas muchas horas. Así terminábamos estando juntos dos, tres o cuatro horas. Solo charlando. Solo desnudando mi alma ante él. Cuando tenía cualquier problema, acudía a él. Me acogía, me escuchaba y después siempre me abrazaba. Aquellos abrazos conseguían recomponer todas las piezas de mi co

Mientras seas tú, serás mi vida - Gerardo Guinea González

Mientras el sol se refleje en tu pelo, mientras el amor no desvele sus secretos, mientras el viento te deje la nariz fría, tú, vida mía, estarás en mis pensamientos. Mientras la vida loca e impaciente viva en tu sonrisa, mientras el llanto, en mis brazos, no nublen tú pupila, mientras no encuentres el camino de vuelta, tú, vida mía, serás mi camino de ida. Mientras tú, perdida, me busques en la vida, mientras otros te dejen la cama vacía, mientras los sueños te encuentren dormida, tú, vida mía, serás mía, serás mi vida. @gerardoguineagonzalez

Blonde - C. B. Altable

  Aquesta foto de Autor desconegut està sota llicència CC BY-SA-NC Que la crítica fusilara el reciente biopic de Marilyn Monroe no hizo más que suponer un acicate para que me animara a verlo. Y que dure dos horas y cuarto tampoco me desanimó lo más mínimo. La película es una biografía de interpretación libre, ya avisan. La revista online Pikara, de contenido feminista, la desmenuzó, la mayor parte para bien, pero criticó algún pasaje, como que, durante los tres embarazos malogrados de la actriz, el embrión tuviera voz propia.  A mi me fascinó, el largometraje se me pasó en un plis-plas. Ana de Armas, en la piel de la actriz se come la pantalla, literalmente se sale. Dicen las críticas deconstructivas que se ha cargado su carrera. Yo creo que, al contrario, la ha subido a los altares de la interpretación. Quiero comentar alguna escena sublime, pero no puedo; todas son sublimes. Y creo que le corresponde estar en el catálogo de películas de culto de Filmin, más que en el hollywoodiense